Lo que tenemos que preservar en nuestras plantas de marihuana para que no sufran en exterior, y que no estén sometidas a una tensión son los siguientes:
Las plantas de marihuana sufren si hay exceso o carencia de agua, hemos de tener precaución con el agua, a las plantas de marihuana les pueden afectar tanto el exceso de agua, como el defecto del agua, las plantas de marihuana tienen que tener un equilibrio en lo que se refiere al agua.
Es importante tener presente que nuestras plantas de marihuana tienen que tener un equilibrio y nosotros somos los que tenemos que mantener este equilibrio en las plantas de marihuana.
Las plantas de marihuana sufren por el defecto de oxígeno en las raíces, es importante evitar la hipoxia, que viene a ser cuando las raíces no reciben bien el oxígeno, y esto lo que provoca es que la planta no asimile bien todos los nutrientes y por lo tanto ralentice su crecimiento y que no tenga buen color y su desarrollo sea lento.
Es importante que le se airee el sustrato y que las raíces tengan oxígeno, bien por un buen sustrato o bien le podemos introducir agua oxigenada.
Las plantas de marihuana sufren con el exceso de temperatura o el defecto de temperatura puede no ser buena, crea una tensión en la planta, ya que si durante el día sufre de mucho calor y a la noche de frío, la planta de marihuana sufre.
Si vemos que por el día hace mucho calor y por la noche mucho frío por la noche sería ideal introducirla en casa y que no tenga una temperatura inferior a 7 grados centígrados, ya que la planta de marihuana, puede ver como se para su crecimiento.
Si la tenemos a un sol de justicia, podemos ponerles una maya en el balcón o en nuestra terraza para que no sufran tanto, y los rayos de sol no las castigen.
Las plantas de marihuana también pueden sufrir mucho si son atacadas por alguna de las muchas plagas de la marihuana. O por alguna de las enfermedades que pueden afectar a la marihuana. Cuando las plantas de marihuana son atacadas por plagas o por enfermedades, las planta de marihuana ralentiza su crecimiento porque no le llegan bien los nutrientes.
Las plantas de marihuana sufren cuando no les llegan nutrientes o cuando tienen un exceso de nutrientes. Si tenemos escasez de nutrientes las plantas de marihuana pueden detener su crecimiento, y enfermar. Si con exceso de nutrientes también las plantas de marihuana pueden verse saturadas y sus raíces no absorber más nutrientes, será necesario un lavado de raíces.
Las plantas de marihuana necesitan un ph que esté entre 5,8 y 6,5, si es mayor o menor, las plantas de marihuana pueden tener problemas para la absorción de nutrientes afectando al crecimiento y floración de la planta de marihuana. Lo importante es medir el ph y regar las plantas de marihuana dentro de esos márgenes.
Hemos de evitar todas estas situaciones en las que las plantas de marihuana pueden sufrir, ya que si sufren nuestras plantas de marihuana, lo veremos reflejado en sus hojas y en el color de las mismas, que harán que nos darán muchos menos cogollos de marihuana.
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