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Haremos un vaporizador de marihuana casero
Ya sabemos que los vaporizadores están de moda y desde hace mucho y son muy utilizados sobre todo por las personas mayores que nunca han fumado marihuana y ahora a su edad muchos de ellos se niegan por eso deciden o bien ingerir marihuana en las comidas, infusiones de marihuana o bien un vaporizador de marihuana.
La vaporización de la marihuana es una de las mejores formas de consumir marihuana ya que con la vaporización de la marihuana aprovechamos muchos más el THC de la marihuana. La vaporización de la marihuana a diferencia de fumar es más saludable.
La vaporización de la marihuana logra evitar los tóxicos producidos por la combustión, para que la hierba no se queme y se pueda aprovechar todo el THC y todo el CBD habría que calentar la marihuana por debajo del puno por el cual se quemaría evitando los tóxicos que si inhalamos cuando fumamos la marihuana y no cuando vaporizamos la marihuana.
En el mercado de vaporizadores podemos encontrar de todas las formas, colores, precios, son muchos los vaporizadores que podemos encontrar y los hay para todos los bolsillos, pero aquí vamos a ver cómo podemos hacer un vaporizador sin que casi nos cueste dinero.
¿Qué necesitamos para hacer un vaporizador casero?
Pequeño bote de conservas de atún de cristal
Pequeño cuter
Tijeras
Alicates de electricista
Cinta adhesiva de electricista
Tubo de vidrio de cristal fino
Tapón del mismo bote de cristal de conservas
¿Cómo hacemos un vaporizador casero?
Esto es fácil cogemos el bote de cristal y tiene que estar muy limpio y durante un tiempo dejarlo al aire libre tanto el tapón de plástico o metal que cubre el frasco de cristal.
Dos agujeros en la capa
Al tapón del frasco de cristal le podemos hacer dos agujeros, si es de plástico será muy fácil hacerle los agujeros. Si es de metal tendremos que utilizar una punta y un martillo, y con la punta y el martillo haremos los dos agujeros del tamaño que necesitemos.
Cuando metamos los tubos tienen que estar juntos y sin holguras lo cubriremos muy bien con pasta de carrocero u otra pasta de secado rápido, o bien con cola, lo que mejor tengamos a mano.
La tapa es lo mejor
Cuando tengamos la tapa en el bote de cristal, mejor no usar cinta ni nada, para soltarlo fácilmente, por eso utilizamos un bote de cristal con su tapa para que enganche perfectamente y se pueda soltar fácilmente.
Ahora en los dos agujeros que hemos hecho en el tapón introduciremos los dos tubos de cristal o de plástico, yo prefiero los trozos alargados que sean de cristal.
Vale, añadimos dentro del bote de cristal la marihuana que vamos a usar, calentamos la base del tarro de cristal con un mechero mejor, con una vela no porque el bote se quedará todo negro, mejor con un mechero. Y en un memento empezarás a vaporizar el THC y el CBD de la marihuana que hayas elegido para tu consumo.
Fácil manejo
Por uno de los tubos tienes que aspirar el vapor y por el otro tubo irá introduciéndose aire en el interior del tarro de cristal. Es un vaporizador casero fácil de hacer. Iremos viendo cómo funciona y lo podremos ir mejorando.
Lo importante de hacer el primer vaporizador casero es que nos irán saliendo nuevas ideas de cómo mejorarlo, de cómo poder hacerlo mejor, y cómo podremos crearlo desde cero.
Un vaporizador casero es fácil de hacer, solo tenemos que mirar a nuestro alrededor de lo que tenemos y ver con un poco de inventiva cómo poder hacer un vaporizador casero y probarlo, eso sí necesitamos tener nuestra hierba preferida para ir probando vaporizador casero que vayamos creando, hasta que se ajuste a nuestras características.
En sucesivos artículos iremos viendo otros vaporizadores caseros que podemos ir haciendo y como los podemos ir haciendo.
Aspira por uno de los tubos ese vapor, mientras que por el otro tubo irá introduciéndose aire al interior. Este vaporizador casero no es muy diferente de otros manuales como el Vaponic, salvando las distancias. Tan sólo debemos conseguir la suficiente experiencia para poder calcular la temperatura que aportemos a la hierba y no se nos queme.
¿Es útil un vaporizador de marihuana casero?
Utilizar un vaporizador de marihuana casero puede ser útil en algunos casos, pero también puede tener ciertos riesgos asociados.
Un vaporizador de marihuana casero es un dispositivo que se utiliza para inhalar el vapor producido por la marihuana calentada. El vaporizador funciona calentando la hierba a una temperatura lo suficientemente alta para liberar los cannabinoides y terpenos en forma de vapor, pero lo suficientemente baja para evitar que se queme. Esto permite inhalar los componentes activos de la marihuana sin los riesgos asociados con la combustión, como la inhalación de humo y alquitrán.
Una de las principales ventajas de utilizar un vaporizador de marihuana casero es que puede reducir los riesgos para la salud asociados con la inhalación de humo. El humo producido por la combustión de la marihuana puede contener sustancias tóxicas y carcinógenas, que pueden ser perjudiciales para la salud pulmonar a largo plazo. El uso de un vaporizador puede reducir la exposición a estas sustancias y proporcionar una alternativa más saludable para la inhalación de marihuana.
Además, el uso de un vaporizador de marihuana puede proporcionar un control más preciso sobre la dosificación de la hierba. Al controlar la temperatura de la vaporización, es posible liberar diferentes cannabinoides y terpenos en diferentes momentos, lo que puede afectar a la calidad de la experiencia y a los efectos terapéuticos.
Sin embargo, también hay algunos riesgos asociados con el uso de un vaporizador de marihuana casero. En primer lugar, es importante tener en cuenta que no todos los vaporizadores caseros son iguales. Algunos dispositivos pueden no calentar la hierba lo suficiente para liberar los cannabinoides y terpenos necesarios, mientras que otros pueden calentarla demasiado y quemarla. Esto puede afectar negativamente la calidad de la experiencia y los efectos terapéuticos.
Otro riesgo asociado con el uso de un vaporizador de marihuana casero es la posibilidad de inhalar productos químicos tóxicos. Algunos vaporizadores pueden contener materiales o componentes que pueden liberar productos químicos tóxicos durante la vaporización. Por lo tanto, es importante elegir un vaporizador de marihuana casero de calidad y de una marca de confianza.
En conclusión, el uso de un vaporizador de marihuana casero puede ser útil para reducir los riesgos para la salud asociados con la inhalación de humo y proporcionar un control más preciso sobre la dosificación de la hierba. Sin embargo, es importante tener en cuenta los riesgos asociados con algunos vaporizadores caseros y elegir un dispositivo de calidad y de una marca de confianza. Además, siempre es recomendable consultar con un profesional médico antes de utilizar cualquier método de consumo de marihuana para asegurarse de que es seguro y adecuado para la condición médica de cada persona.
¿Con qué se puede hacer un vaporizador de marihuana casero?
Existen varias formas de hacer un vaporizador de marihuana casero utilizando materiales que se pueden encontrar fácilmente en casa o en una ferretería. Aquí te presento algunas opciones:
Botella de plástico y pajilla: corta una botella de plástico a la mitad, haz un pequeño agujero en la tapa y coloca una pajilla. Luego, pon la marihuana en la tapa, enciende un mechero y calienta la marihuana. Inhala el vapor a través de la pajilla.
Bombilla: quita la parte inferior de una bombilla, retira todo el filamento y limpia el interior. Haz un pequeño agujero en el lateral de la bombilla y coloca un tubo de metal o plástico en su interior. Pon la marihuana en la parte superior de la bombilla y caliéntala con un mechero. Inhala el vapor a través del tubo.
Vaporizador con una plancha de cerámica: coloca una pequeña cantidad de marihuana en una plancha de cerámica y coloca otra plancha encima de ella. Conecta la plancha a una fuente de alimentación y espera a que se caliente. Inhala el vapor que se produce.
Es importante tener en cuenta que estos métodos caseros pueden ser peligrosos si no se realizan correctamente. Además, es posible que no produzcan vapor de la misma calidad o cantidad que un vaporizador comercial. Por lo tanto, siempre es recomendable usar vaporizadores de calidad y de marcas de confianza.
¿Es mejor un vaporizador de marihuana casero o un vaporizador de marihuana comprado?
Es importante tener en cuenta que los vaporizadores de marihuana caseros no son la mejor opción, ya que pueden ser peligrosos si no se utilizan correctamente y es posible que no produzcan vapor de la misma calidad o cantidad que un vaporizador comercial.
Los vaporizadores de marihuana comprados en una tienda especializada, por otro lado, están diseñados específicamente para calentar la marihuana a la temperatura adecuada para vaporizar los cannabinoides y terpenos, sin llegar a quemarla. Además, están fabricados con materiales de calidad alimentaria y son seguros para su uso.
Otra ventaja de los vaporizadores comerciales es que permiten controlar la temperatura de vaporización, lo que puede ser muy útil para obtener diferentes efectos. Por ejemplo, algunos cannabinoides y terpenos se vaporizan a temperaturas más bajas, mientras que otros se liberan a temperaturas más altas.
Además, los vaporizadores de marihuana comerciales suelen incluir filtros y sistemas de enfriamiento que mejoran la calidad del vapor y reducen la irritación en la garganta.
En resumen, aunque es posible hacer un vaporizador de marihuana casero con materiales que se pueden encontrar en casa, no es recomendable utilizarlos debido a los riesgos y a la posible baja calidad del vapor que producen. Por lo tanto, es mejor invertir en un vaporizador comercial de calidad que garantice la seguridad y la eficacia de la vaporización de la marihuana.
¿Cuáles son las razones por las cuales las personas utilizan un vaporizador de marihuana?
Existen diversas razones por las cuales las personas utilizan un vaporizador de marihuana. Algunas de las razones más comunes son:
Reducción de los efectos negativos del humo: A diferencia de fumar marihuana, la vaporización no produce humo, lo que significa que los usuarios pueden evitar los efectos negativos asociados con la inhalación de humo, como la irritación en los pulmones y la garganta.
Mayor control de la dosis: Al utilizar un vaporizador de marihuana, los usuarios pueden controlar con mayor precisión la cantidad de cannabis que consumen. Esto es especialmente útil para aquellos que desean consumir una cantidad específica de THC o CBD para obtener un efecto terapéutico deseado.
Discreción: Los vaporizadores de marihuana son muy discretos, ya que no producen mucho humo ni olor. Esto es ideal para aquellos que desean consumir cannabis en lugares públicos sin llamar la atención.
Mayor eficacia: La vaporización de la marihuana es una forma más eficiente de consumir cannabis, ya que la temperatura de vaporización permite que los cannabinoides y terpenos se liberen sin ser quemados. Esto significa que los usuarios pueden obtener una mayor cantidad de compuestos activos de la marihuana en comparación con otros métodos de consumo.
Sabor mejorado: Al vaporizar la marihuana, los usuarios pueden disfrutar de un sabor más limpio y puro en comparación con fumarla. Esto se debe a que la vaporización no produce la combustión que puede alterar el sabor y aroma de la marihuana.
En resumen, los vaporizadores de marihuana son una alternativa popular y efectiva para aquellos que desean consumir cannabis de manera discreta, controlada y eficiente. Además, la vaporización también puede reducir los efectos negativos asociados con la inhalación de humo y mejorar el sabor y aroma de la marihuana.
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