Con este sistema de riego, los maceteros mantienen la humedad a nivel de la base, entregando directamente a las raíces de la planta la cantidad necesaria de oxígeno y agua, asegurándoles una mejor y más larga vida. Las plantas mantienen así una reserva para 3 a 6 semanas de autonomía.
El sistema autoregante puede venir incorporado al macetero en un doble fondo, o agregarse por separado a un macetero tradicional. En este último caso, es necesario eliminar el orificio de salida del agua y forrar por dentro las paredes del macetero con un plástico impermeabilizante.
El sistema se compone de un estanque para el agua ubicado en la parte inferior, desde el cual salen:
– Una mecha, encargada de absorber y distribuir el agua hacia la tierra.
– Un tubo de llenado, que permite alimentar el estanque.
– Un indicador de nivel, con un tubo rojo, que permite visualizar la cantidad de agua existente en el estanque.
Las plantas ideales y los tamaños adecuados
· Es importante escoger un macetero adecuado al desarrollo y tipo de planta, de manera que sus raíces alcancen a topar la zona de humedad.
· Los ficus se desarrollan muy bien con este sistema, no así las plantas de raíces pequeñas, que necesitan complementar el efecto con un riego moderado de la superficie.
Ubicación e incorporación de fertilizantes
· Como todos, los maceteros autoregantes requieren ser ubicados en una posición adecuada a cada planta.
· Las plantas deben recibir las dosis de nutrientes correspondientes a su tipo.
· A través del tubo de llenado puede depositar vitaminas y abonos solubles en agua.
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